La miel de acacia cuenta con múltiples beneficios para la salud, que han incentivado que desde hace algunos años, este alimento haya adquirido un lugar especial en muchos hogares. A continuación, te mostramos todo lo que debes saber sobre este alimento. La miel de acacia es una miel completamente ecológica obtenida de la flor de la acacia. Esta miel, se caracteriza por tener un color muy claro, casi transparente y una textura muy ligera; con un aroma floral muy neutro. Asimismo, no suele cristalizarse. En cuanto a su sabor, este carece de demasiados matices, siendo más bien un sabor neutro y suave. Es precisamente su suave sabor, el motivo por el que la miel de acacia se usa como edulcorante natural en muchos casos.
Entre las numerosas propiedades de esta miel, encontramos unos altos niveles de fructosa y la ausencia de un sabor fuerte; lo que promueve que sea usada como edulcorante natural de yogures, infusiones, zumos, etc. Esto se debe a que la miel de acacia endulza los alimentos sin modificar su sabor natural. Por otro lado, al igual que otras variedades de miel, la miel de acacia cuenta con componentes antioxidantes, antimicrobianos y laxantes; así como numerosos minerales y vitaminas esenciales, y su tasa de polen es muy baja.
Gracias a sus diversas propiedades, la miel de acacia ha sido empleada a lo largo de la historia como remedio terapéutico con el que tratar diferentes dolencias o afecciones.
Mejora la circulación de la sangre: Este alimento se utiliza en muchas ocasiones para promover la correcta circulación de la sangre. Concretamente, contribuye en la producción de glóbulos rojos y plaquetas; lo que mejora el flujo de la sangre.
Endulzante natural: Gracias a su bajo índice glucémico, la miel de acacia es empleada en muchos casos como edulcorante natural. Así, es un alimento ideal en las dietas restrictivas, diabéticos o personas que no quieran tomar azúcares industriales. Para ello, una buena opción es tomar una o dos cucharadas de miel junto con frutos secos o pan integral antes de hacer ejercicio.
Reduce el estreñimiento: Lo cierto es que la miel de acacia cuenta con numerosas propiedades laxantes, y mediante su consumo se puede contribuir a la disminución de las inflamaciones intestinales y la detoxificación del hígado.
Efecto calmante: Uno de los mayores beneficios de la miel hace referencia a sus efectos calmantes y relajantes, que ayudan a combatir múltiples trastornos nerviosos y de ansiedad; así como el estrés o el insomnio. Para ello, simplemente se debe añadir una cucharadita o dos de miel de acacia en un vaso de leche, lo que contribuirá a un mejor descanso.
La miel de acacia se cosecha en primavera, cuando las abejas ya han recogido el polen y elaborado la miel. Es entonces cuando, mediante métodos sostenibles, se recolecta el producto de las colmenas, que se encuentran situadas en las inmediaciones de los bosques de acacia. Al emplear métodos sostenibles de recolección, se busca obtener una miel de gran pureza, que no pierda sus propiedades naturales. Así, se obtiene una miel pasteurizada, ecológica y completamente natural.